"Todos tendrán sus oportunidades"

Pellegrini se congratula de que el Madrid disponga de plantilla suficiente para las rotaciones

Metzelder desplazó a Garay del equipo titular y el movimiento en la zaga coincidió con un partido que el Madrid vivió sin grandes sobresaltos en su área. Aparte de un remate de Moisés y una definición fallida de Tamudo, el Espanyol se bloqueó en los últimos metros. Metzelder lo vivió en primera línea. Cuando salió del estadio, tenía una sonrisa en los labios. "En el primer periodo fallamos algunos pases claros", dijo, "y no terminamos de jugar bien. Pero con el tiempo empezamos a ordenarnos. Al final, lo importante para mí fue que en la defensa no tuvimos ningún problema".

Manuel Pellegrini, el entrenador del Madrid, refrescó a la tropa con una rotación de pesos pesados. Dejó en el banquillo a Raúl por motivos técnicos y a Cristiano Ronaldo y Lass, que venían de jugar dos partidos completos con sus selecciones. Entraron Guti, Higuaín y Granero. La consecuencia no fue sólo un cambio de nombres. Cambió el dibujo. El Madrid pasó de jugar con un 4-2-4 ante el Deportivo a pararse con un 4-3-3. Sobre el papel, el nuevo esquema es más armónico. Pero la mezcla, inédita, tardó en funcionar. "Siempre lo dije", apuntó Pellegrini; "todos tendrán sus oportunidades. Sólo deben saber aprovecharlas. Hay 23 jugadores y jugaremos siete partidos por mes. Los que se entrenaron durante la semana en Madrid sacaron el partido adelante. Los que no fueron con sus selecciones sabían que serían la base. Cumplieron ampliamente y eso me pone muy contento. Si contra el Espanyol destacaron Higuaín, Guti o Granero, otro día serán Van Nistelrooy, Diarra, Drenthe o Van der Vaart. Tener tantas opciones me lo pone facilísimo para hacer la alineación del martes en Zúrich, en la Champions".

Pellegrini, que el curso pasado, con el Villarreal, confeccionó 43 alineaciones de 38 posibles en la Liga, demostró que sus anuncios de rotación no eran faroles. Considera que Raúl le resulta más útil en el Bernabéu que fuera. Para jugar de visitante dispone de hombres más veloces para contrarrestar la presión adelantada de los adversarios. También reservó a Lass y Cristiano para que lleguen a punto a Zúrich.

El técnico se asomó por los pasillos con su habitual gesto preocupado. Los movimientos que hizo le dieron qué pensar. En cualquier caso, consideró que el triunfo fue más complicado de lo que reveló el marcador. "Nunca una victoria puede ser sencilla", dijo; "ésta es una cancha muy difícil. Los hongos han deteriorado el césped. El Espanyol nos presionó con gran intensidad en la primera parte y después sintió el esfuerzo porque el campo estaba muy pesado. El Madrid fue sólido. Los jugadores salieron concentrados en no cometer errores. Jugamos con intensidad y nunca dejamos de buscar el arco contrario".

"La diferencia estuvo en las ocasiones de gol", observó el chileno, comparando las prestaciones de los dos contrincantes; "con la cancha pesada, ellos sintieron el ritmo del partido más que nosotros. El Madrid mereció la victoria porque generó muchas más ocasiones. Nosotros, en la defensa, apenas tuvimos dificultades".

Cuando le preguntaron por el gol de Cristiano Ronaldo, el primero que marca en la Liga, Pellegrini se puso a la defensiva. "Él no se ha quitado un peso de encima", dijo; "se le mira con lupa en exceso. En el partido pasado, contra el Deportivo, hizo dos jugadas muy importantes. No creo que tenga muchos problemas. Le veo integrado y muy consciente de sus responsabilidades".

A su vez, Mauricio Pochettino, el entrenador del Espanyol, declaró: "El resultado desmerece la labor y el esfuerzo de mi equipo. La primera parte fue buena".




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