'Óscar' a los mejores actores secundarios

Higuaín lidera el papel de la infantería en el equipo blanco · Van der Vaart aprovecha la irregularidad de Kaká para ganarse un hueco · Arbeloa aporta polivalencia y goles · Y Marcelo, descaro y asistencias

Seguramente, cuando Florentino Pérez y Jorge Valdano planificaron la plantilla del Real Madrid 2009-10 basaban sus aspiraciones de éxito en los grandes fichajes. La llegada al club blanco de Cristiano Ronaldo, Kaká y Karim Benzema prácticamente eclipsó al resto de una plantilla a la que llegaron bastantes más caras nuevas. Ahora, a dos meses del final de la temporada, sólo Cristiano está ofreciendo el rendimiento esperado por el club. El equipo, cierto, sólo aspira ya a un título. Y si aún está en disposición de hacerlo es gracias a los jugadores inicialmente considerados como secundarios.

De todos ellos, sin duda el caso de Gonzalo Higuaín es el más destacado. Empezó la temporada por detrás de Benzema y de Raúl, pero aprovechó cada una de sus oportunidades hasta ser indiscutible como referencia en ataque junto a CR9. Está firmando la temporada de su vida, permitiéndose incluso la osadía de disputar el Pichichi a Leo Messi.
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Álvaro Arbeloa, otra de las incorporaciones del verano, ha convertido en calderilla los en torno a cuatro millones de euros que costó sacarlo de Anfield. La polivalencia del defensa salmantino está siendo una bendición para Manuel Pellegrini, que lo ha usado en ambos laterales. Jugando como 2, además, ha hecho dos goles que, si el Barça no impide, pueden valer media Liga: el que abrió el marcador para un atascadísimo Madrid en Chapín y el que ponía en ventaja a los blancos en el último derbi.

Poco se esperaba este año de Rafa Van der Vaart. Era el holandés más débil de la plantilla, pero él se quedó y el bajo rendimiento de Kaká le brindó oprtunidades que, como Higuaín, no ha desaprovechado, hasta el punto de convertirse en uno de los hombres claves del último tramo liguero.

Por último, el brasileño Marcelo también se ha reivindicado a base, sobre todo, de asistencias. Buen desatascador del equipo, sobre todo en el Bernabéu, aporta descaro en ataque y equilibra un equipo que suele abusar de la banda de Cristiano.