Raúl demuestra una vez más que por algo es el capitán

Raúl González es, sin duda, el futbolista español del que más se ha hablado en los últimos tiempos. Todos los que le vieron nacer al fútbol se han creído con derecho a juzgarle. Muchos, incluso, a enterrarle. Él nunca ha contestado. Al menos, no de palabra. El capitán madridista sólo discute en el campo y allí no ha habido quien le lleve la contraria. Y mucho menos quien le entierre.

Desde hace unos años, cada vez que el Madrid ha incorporado a un futbolista ofensivo ha surgido la misma cuestión. ¿Le quitará el puesto a Raúl? Una pregunta lanzada en muchos casos con cierto veneno, pues no han faltado quienes insinuaban que movía hilos para influir en los fichajes. Ronaldo, Owen, Cassano, Higuaín, Huntelaar... El Madrid no ha escatimado a la hora de reforzar su vanguardia. Pero ninguno ha conseguido quitarle el puesto. Por una sencilla razón: nadie ha demostrado ser mejor que él.

Eso es lo que ha recordado hoy Raúl. Pero a la vez ha demostrado por qué no sólo pasará a la historia como uno de los mejores de todos los tiempos, sino como un capitán ejemplar. Podría tirar de palmarés para reclamar protagonismo, podría airear el brazalete y dar un puñetazo en la mesa. Pero no. En el ‘7’ no hay un gramo de divismo. Sabe que lo mejor es que los nuevos fichajes se acoplen cuanto antes y sus primeras palabras han sido para elogiarlos públicamente.

Y dentro del vestuario hará cuanto esté en su mano para integrarlos. Asumirá, como hizo en su día, el papel de vertebrador de esa ONU de estrellas en la que se va a convertir el vestuario del Madrid. Estará ahí para recordarles los valores del escudo que defienden. Pero también para pelear por un puesto. Como siempre. La lucha pinta más difícil que nunca, pero lleva el coraje en el ADN. Y si no gana, seguirá ejerciendo de gran capitán. Un manual de comportamiento para sus compañeros.
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